El lifiting por radiofrecuencia es un tratamiento médico estético muy demandado, casi al mismo nivel que la toxina botulínica, gracias a los grandes resultados que consigue en remodelado facial y corporal.  Los equipos de lifting por radiofrecuencia más avanzados permiten hoy en día tensar la piel y la remodelación corporal con resultados apreciables en una sola sesión y con un tratamiento no invasivo. Se consigue devolver el tono y tensar la piel arrugada, apergaminada y flácida del rostro y zonas como el abdomen, brazos y glúteos.

El lifting por radiofrecuencia emplea una tecnología que calienta diferentes capas de la piel estimulando la síntesis del colágeno. Aporta una mayor intensidad de calor en las capas más profundas de la piel.

Tras el tratamiento de lifting por radiofrecuencia se estimula la producción de colágeno y elastina. Así se consigue ‘recolocar’ el rostro que ha perdido tersura, tensar la piel arrugada, apergaminada y flácida y lo mismo ocurre con zonas como abdomen y glúteos, donde además se suaviza la celulitis y mejora el aspecto de piel de naranja. Los efectos se suelen ver desde el primer día, aumentan hasta pasados seis meses y duran hasta 2 años.  Tras cada sesión de lifting por radiofrecuencia se puede seguir la rutina diaria con normalidad. Puede realizarse en cualquier época del año, en cualquier tipo y color de piel y no es necesario evitar la exposición solar.

Tras la sesión se notan los primeros resultados porque tiene un efecto lifting post-tratamiento. El 80% de los resultados se aprecia a partir de los seis meses, quizá un poco más en el cuerpo, y van mejorando gradualmente hasta el año. Los efectos del lifting por radiofrecuencia duran hasta dos años y no necesitan ningún mantenimiento.